La evolución y el valor de la visualización de datos
La historia de cómo las organizaciones interactúan con sus datos, tiene su origen en las hojas de cálculo, herramientas que reinaron como el recurso principal para el manejo y la presentación de la información durante mucho tiempo. Sin embargo, la creciente complejidad de la información y la necesidad de obtener insights rápidos y claros abrieron paso a herramientas de visualización. Esta transición, aunque gradual, marcó un punto de inflexión.
Inicialmente, el manejo de datos y la generación de reportes recaían principalmente en los equipos de negocio, quienes utilizaban hojas de cálculo para analizar la información y extraer conclusiones. Con la evolución de las infraestructuras de bases de datos y la creciente sofisticación de los análisis requeridos, las áreas de IT asumieron un rol central en la gestión de los datos, centralizando la creación de reportes.
Esta centralización, si bien buscaba garantizar la integridad y la seguridad de los datos, a menudo repercutía con una falta de agilidad en la entrega de información relevante para la toma de decisiones del negocio. En este contexto, emergieron las áreas de Analytics dentro de las propias unidades de negocio. Profesionales con conocimientos técnicos y de negocio comenzaron a desarrollar la capacidad de acceder y analizar los datos. Esta descentralización de la inteligencia del negocio hacia las áreas funcionales marcó una evolución significativa.
La calidad de la visualización de datos también experimentó una transformación. Con la aparición de herramientas que incorporaban las mejores prácticas de visualización de datos, se experimentó un avance crucial. Estas herramientas se centraron en cómo el cerebro humano procesa la información visual, utilizando principios de diseño para presentar los datos de manera clara e intuitiva.
La tendencia se inclinó hacia la integración de los profesionales que manejan estas herramientas dentro de las áreas de Analytics, estrechamente vinculadas al negocio. Este cambio reconoce el valor de la proximidad para comprender las preguntas clave y diseñar visualizaciones que respondan a las necesidades de los usuarios.
En conclusión, la evolución de la visualización de datos en el entorno B2B ha pasado de la dependencia de las hojas de cálculo a la adopción de herramientas especializadas y la profesionalización del rol del visualizador. El valor reside en la capacidad de comprender las necesidades del negocio, aplicar principios de diseño efectivos y comunicar la información de manera clara, permitiendo a las organizaciones tomar decisiones más informadas y estratégicas.